Ayer a la mañana se disputó la IV edición de la popular
subida a Arnoate. Aunque la meteorología no ayudó a que acudiese mucha
gente, 22 valientes se animaron a participar en la carrera.
Con ese dato, se mantiene más o menos estable la cifra de
participantes, ya que en las dos ediciones anteriores participaron 26
corredores.
En esta ocasión, la nota positiva, en cuanto a la
participación, la puso la debarra María José Castro, que fue la primera
corredora de la historia en correr la carrera. Desgraciadamente, fue la
única pero por lo menos, sirvió para inaugurar el palmarés de la
carrera.
María José necesitó 30'37" en cubrir los 4,6 kilómetros de la carrera y en la clasificación absoluta concluyó en 19ª posición.
En cuanto a la clasificación masculina, el ganador fue el
también debarra Igon Manzisidor, que repitió la victoria conseguida hace
dos años. En aquella ocasión necesitó un tiempo de 21'55" y ayer logró
rebajar esa marca en 21", ya que concluyó la carrera en 21'34".
Sin embargo, se quedó un poco lejos del récord de la carrera, que fue establecido el año pasado por Josu Uriarte en 20'34".
El segundo clasificado ayer fue el alavés Rubén Bravo, que necesitó 22'56" y aventajó en tan solo 3" al azkoitiarra Jon Garte.
Para concluir la jornada de una forma agradable y entrar un
poco en calor, la organización invitó a todas las personas que
acudieron a la prueba a un hamaiketako en Arnoate.
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